#MiDerechoALaEducacion: ¡las exigencias de infancias y adolescentes trans!
Cuando las aulas se convierten en estos lugares seguros, los beneficios son para todes, las infancias y adolescencias pueden:
- Entender que la sexualidad va más allá de las prácticas sexuales o la reproducción. ¡Sí, es más amplia de lo que creemos!
- Aprender sobre su cuerpo y sus procesos.
- Reconocer límites y ejercer el consentimiento en cualquier relación.
- Reducir sentimientos de pena, vergüenza o incomodidad que pueden experimentar,permitiendo así hablar de sexualidad desde la confianza, el respeto y el placer.
- Explorar sus identidades libremente.
- Descubrir lo que les hace sentir bien, cómodes y segures.
- Reflexionar acerca de las actitudes, pensamientos o roles que pueden tener en sus relaciones afectivas y/o sexoafectivas.
- Reforzar su habilidad para la toma de decisiones informadas.
- Conocer sobre las infecciones de transmisión sexual, embarazos no deseados, y cuáles son los métodos para prevenirlos.
- Promover la inclusión de la diversidad de personas con identidades no normativas, con condiciones de salud o discapacidad, y con distintos contextos culturales.
Los salones pueden ser espacios donde les estudiantes hablen de sus inquietudes y dudas, refuercen su autonomía, y ejerzan sus derechos sexuales como el poder expresar su identidad y/o expresión de género sin rechazo ni discriminación. Aquí puedes consultar los 14 derechos sexuales que todes tenemos.
Educación Integral en Sexualidad en las aulas, una exigencia de las infancias y juventudes trans
Contar con una visión de la sexualidad que no replique la cisheteronorma (la idea de que todas las personas somos cisgénero y heterosexuales y que con base en ello se construyen estereotipos de género) es responsabilidad de todes. Esto sigue siendo un desafío por distintas razones: los mitos y tabúes, el estigma en torno a la diversidad sexogenéricaque muchas veces se refleja en una falta de sensibilización en las escuelas, la falta de presupuesto para integrar la EIS al currículum, entre otras.
Cuando la EIS no se integra a las escuelas, que son espacios donde les estudiantes pasan mayormente su tiempo de desarrollo, existe la posibilidad de que estos espacios sean hostiles para quienes se nombran como parte de la comunidad LGBTIQ+, ya sea por su expresión y/o identidad de género que no se ´apega´ a lo normativo. sto sucede particularmente con las infancias y juventudes trans.
Desde Infancias Trans A.C., hemos acompañado a infancias, juventudes y sus familias que han sido afectades por esto. Una de las demandas que tenemos en conjunto es la solicitud a la Secretaría de Educación Pública (SEP) de implementar un Protocolo de Actuación para Infancias y Adolescencias Trans y No Binaries en espacios educativos.
La SEP es la autoridad educativa a nivel federal y es parte de sus obligaciones garantizar el derecho a la educación de todes. Al no tener un documento oficial que garantice una educación libre de discriminación para las infancias y adolescencias trans y no binaries, está permitiendo que personal directivo y docente decida de acuerdo a su criterio, acompañado de prejuicios, quién sí y quién no merece asistir a la escuela sin temor a vivir violencias. De esta manera, promoviendo la deserción escolar de las personas de la diversidad sexogenérica, siendo esto algo que concretamente va en oposición a las obligaciones constitucionales de la SEP.
Que les profesores no antepongan sus creencias es lo que infancias y juventudes trans y no binaries piden, aunque cabe mencionar que los estigmas y prejuicios también se replican por el personal administrativo y directivo, así como las demás personas que forman parte de estos espacios; xadres de familia, tutores, compañeras y compañeros.
Lo que nos comparte Mati, de 9 años, es un claro ejemplo de esto: “quiero jugar sin que regañen a mis amigos por hacerlo conmigo”. Esto demuestra que debe existir un acercamiento y trabajo de sensibilización con personal educativo, xadres de familia y estudiantes para tener ambientes escolares más inclusivos, respetuosos y que promuevan en crecimiento de todes.
Discriminación y violencia en las aulas en contra de las infancias y juventudes trans
Otra de las situaciones de discriminación y violencia que pueden llegar a vivir las infancias y juventudes trans y no binaries es respecto al uso de baños que correspondan a su género. Alba, de 14 años, nos dice que “elegir baños en la escuela es aterrador, no saber si me sacarán”. Esto, además de afectar su salud emocional, pone en riesgo su salud física, su integridad y seguridad.
“Merezco una educación digna y respetuosa” y “Por una educación y ambiente escolar libre, seguro e informado para lxs niñxs trans!” son frases que nos recuerdan que la construcción de espacios escolares es una tarea pendiente de todes quiénes participamos en estos ambientes, pero sobre todo una responsabilidad de las autoridades.
Ante este panorama, desde Infancias Trans A.C lanzamos la petición #MiDerechoALaEducación donde se exige a la SEP que publique un protocolo de actuación para infancias y adolescencias trans y no binaries de manera que se garantice su acceso a la educación libre de violencia. Desde Balance A.C. respaldamos este llamado en pro de su bienestar ¡Puedes firmar la petición aquí!